El concejal no adscrito, Javier González Tocino, vota en contra de una enmienda suya, aceptada por todo el conjunto del equipo de gobierno.
La pinza del concejal con el PP echa también al traste otra propuesta implantada por él mismo hace poco más de un mes, cuando tenía delegada la competencia de deportes.
No se respira buen ambiente político en el Ayuntamiento de Sahagún, y prueba de ello ha sido el último Pleno celebrado en la mañana de hoy, donde la “ pinza “ del concejal no adscrito con el PP, no ha dejado prosperar las iniciativas presentadas por parte del equipo de gobierno municipal.
Cabe recordar que la suma del PP con este concejal (ex de UPyD, partido del que forma parte la coalición gubernamental) suma la mayoría necesaria para frenar cualquier iniciativa que presente el gobierno presidido por el alcalde socialista Lisandro García de la Viuda.
Las proposiciones presentadas trataban de la modificación de dos ordenanzas relacionadas con el uso del pabellón municipal y las pistas de padel, con el fin de adaptarlas a la implantación del sistema de reservas informático, recién implantado por parte del Ayuntamiento.
- Javier González Tocino, que además fue parte activa para esta implantación, realizó una enmienda a la propuesta inicial que fue aceptada por el equipo de gobierno, votando en contra de la misma con el estupor de todos los presentes en la sala que no podían creer lo que estaba sucediendo.
Además, se votó en contra también de la creación de un Reglamento para la Escuela de Educación infantil, con el fin de adaptar la misma para el nuevo tramo de 0 a 3 años previsto para el próximo curso.
Para el concejal magenta, “estos son actos que atentan contra el desarrollo del pueblo. Todas las modificaciones que se planteaban estaban consensuadas previamente con los colectivos afectados. Pero a esta gente le interesa más sus réditos políticos que el interés de sus propios conciudadanos. El ejemplo más claro es la actitud prepotente del concejal no adscrito que a pesar de que nadie le ha echado de ningún sitio, que ha obrado por propia voluntad, ni emplea la coherencia votando en contra de él mismo, ni le preocupa nada más que su propio interés, perjudicando el progreso de este Ayuntamiento, creyendo que se lo está haciendo a alguien en particular. Debe considerar su posición, porque si no el pueblo no lo entenderá. De todas formas nosotros seguiremos intentándolo” termina diciendo Ramón Rodríguez de Alaíz.