Como cada año, el 25 de noviembre celebramos el “Día internacional para la eliminación de la violencia de género contra la mujer”, fecha elegida por la Asamblea General de Naciones Unidas en el año 1999.
Las Administraciones Públicas de León nos sumamos a la conmemoración del Día Internacional para sensibilizar al conjunto de la población leonesa sobre la gravedad, las dimensiones y las consecuencias del problema, y por supuesto para manifestar su condena y la más absoluta repulsa pública frente a la violencia de género ejercida sobre las mujeres.
La violencia de género constituye la manifestación más brutal de la desigualdad que persiste entre mujeres y hombres, muchas veces arraigada en patrones culturales, estructurales y en nuestro actual sistema de valores de orden patriarcal y tradicional que perpetúan la desigualdad.
La violencia de género no es un asunto privado, es un problema social y es una amenaza para la libertad de las personas, la igualdad de las mujeres, y el bienestar del conjunto de la sociedad.
La violencia de género altera la vida de las mujeres, destruye su salud y vulnera sus derechos y libertades fundamentales, entre ellos, y como última consecuencia, la vida. Por ello hoy queremos recordar a las 37 víctimas con consecuencia de muerte registradas en lo que va de año, y manifestar nuestro más enérgico rechazo frente a los agresores y maltratadores de mujeres.
La sociedad en su conjunto, los Poderes Públicos, los Agentes Sociales y todas las personas en particular, estamos llamados a participar activamente en la lucha frente a la violencia que se ejerce sobre las mujeres por el hecho de serlo, y que adopta diferentes formas y manifestaciones: Violencia física, violencia psicológica, violencia sexual, violencia económica, tráfico y trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual, violencia originada por la aplicación de tradiciones culturales, acoso sexual, acoso laboral por razón de género y que se manifiestan en el ámbito de la pareja, de la familia, también en el ámbito laboral, social y comunitario.
Por tanto:
- Debemos tomar conciencia personal, institucional y colectiva de responsabilidad, frente a la violencia de género que sufren las mujeres y actuar de forma contundente con todos los recursos disponibles para erradicar este grave problema social
- Debemos revisar nuestro actual sistema de valores con una actitud crítica, modificar determinados patrones culturales que perpetúan la desigualdad, fomentando modelos alternativos de convivencia basados en el respeto y la igualdad en las relaciones de pareja.
- Incrementar el desarrollo de actuaciones de carácter preventivo y de sensibilización frente a la violencia de género entre los/as adolescentes para que aprendan a identificar relaciones afectivas abusivas basadas en los mitos del amor romántico y establezcan relaciones sanas basadas en el respeto y en la igualdad.
- Garantizar desde el ámbito institucional la rápida detección e identificación de las situaciones de violencia, la eficaz atención integral a las víctimas, tanto a las mujeres como a sus hijos e hijas, con la óptima coordinación de todos los agentes implicados, que sólo será efectiva si los profesionales responsables cuentan con la adecuada formación especializada.
Por todo ello, las personas presentes en este acto nos sumamos a la conmemoración del Día internacional para la eliminación de la violencia contra la mujer, a la vez que condenamos públicamente este tipo de violencia y nos comprometemos a luchar contra ella hasta conseguir una sociedad libre de cualquier forma de maltrato.