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Y volvió a aparecer Cristiano. En el momento clave, en un día idóneo, en Alemania. Doblete del portugués que pone al Real Madrid con pie y medio en semifinales ante un Bayern, que al fallar el penalti, se vino abajo y estuvo a merced de un equipo imperial en la segunda mitad.

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El Real Madrid salió espeso al Allianz y lo pagó caro. El Bayern mandaba por medio de Xabi Alonso y de Thiago que llevaban el ‘timing’ del juego. A estos se les unía en el tridente del eje central, Arturo vidal, que demostraba estar un punto por encima, físicamente hablando Los de Zidane estaban sin ideas, sin capacidad para tomar el balón e intentar gobernar el encuentro. Tanto es así, que en uno de los muchos corners, Vidal remató libre de marca para el 1-0. Falló Nacho en primer lugar y Keylor no estuvo acertado tampoco. Ventaja germana  y pudo ser más amplia antes del descanso. El propio Vidal falló un penalti que no era por mucho. Robben, rejuvenecido diez años, era una pesadilla para la defensa merengue. El Madrid gozó de alguna ocasión aislada, pero ni Benzema ni Cristiano acertaron a batir a Neuer. En medio de la locura se llegó al entretiempo. 

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Y justo nada más iniciar el segundo tiempo, Carvajal le pone el caramelo a Cristiano Ronaldo, sí al portugués, que volvía a ser decisivo para el Real Madrid. Primer objetivo, cumplido, marcar fuera de casa. El penalti fallado antes del descanso, afectó y mucho a los de Ancelotti. Bale tuvo el segundo, pero apareció Neuer. El galés se tuvo que ir del campo tocado y entraba Asensio. Adiós a la BBC, de la cual no se obtuvo señal desde el Allianz. Tan afectados estaban los alemanes, que Javi Martínez se autoexpulsó en una acción innecesaria. Los blancos podían liquidar, faltaba meterla. Benzema la tuvo, pero volvió a sacar Neuer. El encuentro había cambiado. Zidane dijo: «todos adelante» y así fueron, inteligentes. Olieron sangre y fueron como un tiburón, a por la presa. Y fue él, el que nunca aparece, el que esté mejor o peor futbolísticamente, tiene el gol en el momento clave. Cristiano Ronaldo hizo el 1-2 y silenció el Allianz. Su gol 100 en Europa. De ahí al final, los merengues continuaban su recital en una segunda mitad primorosa, ante los olés del público madridista desplazado a Alemania. El Madrid de Zidane volvía a responder en un partido grande.

Un partido en el que pintaban bastos para el Real Madrid, lo convirtió en oro. El fallo del penalti, justicia divina, noqueó al Bayern de un Ancelotti sin respuesta y con el equipo cansado. Imperial segunda parte del Real Madrid que presentó credenciales para ser de nuevo candidato a ganar la Champions League. Cristiano apareció con un doblete para poner de su lado la llave de cuartos. El martes, todo se decide en el Bernabéu, pero el portugués ha dicho hoy que esto es suyo.

 

Juan Lorenzana Prieto @juanlp91

Fotografías: Twitter UEFA