En el mes de enero comenzaron las obras en la principal arteria de la ciudad de León con el cierre paulatino de los diversos tramos de la avenida hasta que ahora mismo la misma se encuentra totalmente vallada de lado a lado en toda su extensión, para unas obras de adecentamiento, que no de peatonalización, como se planteaba al inicio, por mor de los vaivenes del partido Ciudadanos.
En cualquier caso el plazo de ejecución previsto hasta finales de julio, y a la vista de lo escaso de las obras a ejecutar, es, a todas luces, una auténtica aberración urbanística que no solamente está provocando el descontento de los leoneses que transitan peatonalmente por la misma, sino que damos como ciudad una pésima imagen a quienes nos visitan, máxime cuando este año se pretende dar todo el boato y esplendor a la capitalidad gastronómica.
Hemos podido comprobar no sólo la escasez de operarios en las obras que se están ejecutando, sino también la clara parsimonia de los trabajos que indudablemente viene motivado por ese amplio espacio de tiempo que a las adjudicatarias de las obras se le ha otorgado, por lo que desde UPL, en aras a evitar los perjuicios a los peatones, y en aras a evitar que la ciudad de León se muestre en obras permanentes durante más de la mitad de la capitalidad gastronómica, solicitamos al equipo de gobierno del Partido Popular, que, en la medida de lo posible, adopte las medidas oportunas para que estas obras finalicen antes de las fiestas de León, plazo perfectamente posible, si existe voluntad para ello.