El baile de las gallinas
Se despertó unos minutos antes del amanecer. Era la hora en que tenía que romper el silencio y hacer que el mundo despertara y...
Caballero, caballero
- Caballero, caballero, no oigo los cascos de tu caballo. Caballero, caballero, no oigo tu voz que me llama bajo la luna creciente. No...
La muchacha del lago oscuro
La luna se reflejaba en el agua clara de aquel lago en medio de las montañas. La roca caliza, blanca y erosionada, resistía a...
La despedida
La peregrina francesa, nieta de una abuela cacereña, me estaba preguntando por las distintas imágenes de la Virgen que hay en la iglesia. Comentábamos...
Una lápida bien cuidada
El cementerio era ruinoso, falto de cuidado y lleno de hierbas y matojos. Las tumbas estaban descuidadas y, yo diría, abandonadas, sin limpiar desde...
Cincuenta libros repetidos
Cuando murió el abuelo, con casi ciento diez años, su nieto preferido se encontró perdido. Estaba muy unido a él, demasiado que decía su...
Siempre a mi lado
Desperté sobresaltado aquel día. No había dormido muy bien. Los sueños venían vertiginosos una y otra vez y me despertaban cada poco. Había una...
La madre y el niño llorón
Nadie había entrado en aquella habitación desde hacía mucho, muchísimo tiempo. Nadie se acordaba ya en aquella mansión solitaria en las afueras de la...
El guardián y la golondrina
A las nueve en punto, como cada día, la gran llave de hierro dio dos vueltas en la vieja cerradura y el cerrojo interior...
Crónica de una boda de alta alcurnia
- El novio puede besar a la novia. – dijo la sacerdotisa para concluir la ceremonia. Y Belenos, el novio astur, besó con pasión...
Una plaza y seis calles a vigilar
A estas horas de la tarde apenas empezada, solamente en aquella calle y, en concreto, en aquella esquina que daba a la plaza, era...
Cuando baja la marea
Dos años llevaban sus padres viviendo en aquella playa. Habían construido allí la casa para huir de los jaleos y los ruidos de la...
Quiero ser aprendiz de mago
- ¿Estás seguro que éste es el camino?, preguntó mi amigo apenas habíamos salido de la ciudad. Ni siquiera había amanecido aunque ya las...
El maldito pajarraco
Había dormido bien esa noche a pesar de la tormenta. El albergue, en aquel sitio bastante solitario en donde se encontraba, estaba bien abastecido...
La línea roja que va creciendo
Nadie la vio nacer. Nadie recordaba siquiera haberla visto nunca con anterioridad. Nadie sabía, a ciencia cierta, en dónde había nacido, aunque varias voces...
El cuarto de los ratones
Aquella casa tenía, como no, su propio cuarto de los ratones. Era bastante grande y bastante oscuro. La señora de la casa lo utilizaba,...
Pájaro en una tormenta
Casi lo pisé cuando se cruzó conmigo en medio del parque. Me miró aterrado y pudo, a duras penas, llegar al otro lado. Se...
Busca la salida
“Todo lo que siempre has querido está al otro lado del miedo". George Addair.
Llevaba ya más de dos semanas sentado en aquella silla que no le dejaba...
Las ranas se fueron de viaje
Solo quedaban veinte ranas en la pequeña charca a la orilla del reguero. La charca se iba consumiendo poco a poco. El agua que...
Mantente lejos de las piedras azules
Sus padres le habían advertido bien de que no traspasara la línea de las piedras azules. Más allá empezaba lo desconocido. Más allá estaba...